EXPEDIENTE VALLECAS

 

Muchos de vosotros habréis visto "Verónica". La película cuenta el caso de una adolescente madrileña que, tras hacer una ouija con sus amigas con el propósito de hablar con su padre recién fallecido, comienza a ser atormentada por algo, junto con su familia. Y ese algo termina provocando la muerte de la joven.

Esta película, que todos tratamos como ficción, está inspirada en un caso real que ocurrió en España, y que en su día quedó guardado como "informe Vallecas".

El inicio de esta historia comienza, igual que en la película, Estefanía, una joven madrileña que vivía en la Calle Luis Marín, 8, en el distrito de Vallecas. Realizó una ouija en el colegio junto a sus amigas, estás fueron descubiertas por una profesora, que al darse cuenta de lo que estaban haciendo rompió el tablero en dos. Las allí presentes, en su momento, aseguraron que, al romperse el tablero, emergió una especie de humo que Estefanía inhaló. 

A partir de ese momento la joven empezó a tener un comportamiento extraño: escuchaba voces, sufría ataques epilépticos y aseguraba que por las noches la venían a visitar figuras humanas sin rostros y cubiertas por un manto que le decían que se fuera con ellas. Sus padres la llevaron a diferentes hospitales, pero nunca encontraban nada extrañó en ella.

Finalmente, Estefanía murió el 14 de julio de 1991 en extrañas circunstancias, su muerte fue catalogada como muerte de súbita y sospechosa.

Sin embargo, aquí no termina la historia, una vez Estefanía muere, su familia comienza a sufrir fenómenos paranormales en la casa: se escucha a Estefanía gritar, la risa de un anciano, los vidrios se rompen, los objetos se mueven, las puertas se abren y se cierran solas etc.

El suceso que más aterrorizó a la familia fue cuando el 1 de noviembre de 1993, dos años después de la muerte de la joven, una de las fotos de Estefanía que sus padres tenían colgada en la pared comienza a arder, lo llamativo de esto es que lo único que verdaderamente ardió fue el rostro de la joven, mientras que el marco de la fotografía y los alrededores estaban intactos.

Este caso es un caso especial, ya que está documentado por la policía, desde el momento en que una noche, la familia de Estefanía, aterrorizada, llamó a la policía.

El informe policial de aquella noche describe los sucesos que a policía vio en esa casa: una puerta de armario que se abría violentamente a pesar de estar cerrada con llave, ruidos atronadores provenientes del balcón, donde, sin embargo, al salir a esta estancia no había nada. También se habló de una extraña baba marrón que se había formado en la mesilla de noche y de un suceso que ocurrió a los ojos de la policía, en el que se describió cómo un crucifijo que estaba colgado en la pared fue arrancado de repente, y al volver a la pared dónde había estado colgado hasta entonces, se podía apreciar la marca de unas garras.

La familia de Estefanía terminó mudándose a otra casa, donde no volvió a vivir ningún fenómeno extraño, y los nuevos inquilinos, que se mudaron a la casa donde habían sucedido todos los sucesos paranormales, afirmaron que nunca ocurría nada raro. Más adelante la madre de Estefanía fue diagnosticada de inestabilidad emocional y propensión a la ansiedad, sin embargo, aunque los sucesos pudieran haber sido exagerados por la familia de Estefanía, el informe policial redactado aquel día narra una lista de sucesos objetivos que ocurrieron aquel día.